Deseo imposible

¡Que más quisiera yo…!
Por un instante,
perderme entre poemas que se esconden
en mis sueños…
Dejar que vuelen, sin tratar de asirlos;
sin estirar la mano,
y así, volando entre las nubes,
puedan ellos encontrar un nido…
O mutarse en pequeñas humaredas
que yo pueda mirar desde lo lejos…
Y allí, borrarlos,
ante lo irremediable del destino.
Pero los quiero aquí, muy cerca,
para que ellos sean reflejo de mi alma,
de la belleza que se esconde en ella…
¡Ay, si fuese así… si fuese cierto!
Tan sólo soy leal conmigo…
También quiero volar… Tiendo mis alas,
porque existo,
y sólo sé temblar, mientras florezco y muero.
                                                  

Comentarios

Alicia Abatilli ha dicho que…
Muchas veces estamos ante la duda de publicar o no una poesía, algunas de ellas por considerarlas impropias las borramos, las perdemos en el cielo de los poemas silenciados.
A veces no queremos que la poesía nos aceche, preferiríamos olvidarnos de ella, pero por una necesidad, por ser leales con nosotros mismos, le damos vida.
Afortunadamente, en algunos casos.
Otras, el lector pasará de largo, se hará el distraído, no dirá nada, porque esa poesía no tocó su alma, otras es tan cercano lo que alguien escribe, que como me sucedió, hace dos días con Sara O. Durán, es inevitable, al leer algo así, no derramar esa emoción de alguna manera.
Un abrazo.
Gracias por permitirme dar cauce a esta necesidad
®MariE ha dicho que…
Nunca borres un poema, mejor lo aparcas y lo retomas para levantar ese vuelo en un momento dado.

Me ha encantado.

Un abrazo en la distancia
Rafael ha dicho que…
Nunca borres un sentimiento porque quizás al sacarlo del alma y volcarlo al papel encuentras el alivio que necesitas. Yo, como tú y como tantos, "También quiero volar... Tiendo mis alas porque existo, y sólo sé temblar, mientras florezco y muero."
Un abrazo en la tarde,
Rafael
Toni Barnils ha dicho que…
Tocar con la punta de los dedos una poesía y no ser capaz de parirla. Esto pasa muy a menudo. Temor a mostrar demasiado de nosotros, también sucede. Aquí quedan muchas guardadas en el borrador, quien sabe cuando querrán tener vida .

mi abrazo
Deja que hable el alma , deja que hable el corazón. Tus versos son los silencios que nos cantan , tus versos desnudan la pasión, tus versos son las emociones , son los sentimientos que llegan al corazón.
¡Gracias por saber trasmitir tan bellas emociones!No calles! vive, así, dando vida a tus pensamientos.
Besos.
Ariel Britos ha dicho que…
Creo es cierto, que tus poesías son el reflejo de la belleza de tu alma.
No sólo eres leal contigo.
Y es muy bueno que quieras extender tus alas, publicar tus versos, aunque a veces te parezca que no, ¡hazlo!, nosotros los necesitamos, no importa que no tengan el valor literario que exigen los catedráticos, los catedráticos son un bodrio, leerlos digo.
Tus poesías llegan y hacen nido en quien las lee.
Laura Caro Pardo ha dicho que…
Florecer y morir al mismo tiempo.
Es una hermosa doble metáfora que duele como los sueños rotos.

Un abrazo, Alicia.
me encantó.
ANTONIO CAMPILLO ha dicho que…
Alicia, pienso que los poemas siempre deben volar cuando despiertan de un sueño cuasi real. Si no fuese así nunca se podría mirar desde un punto de vista diferente al mundo en el que se encuentra su autor.
Creo que borrarlos es demasiado drástico porque el destino no es nada más que una pequeña casualidad de una realidad posible. No es definitivo jamás y puede cambiar mediante un leve roce en la línea vital de cualquiera.
Temblar mientras se florece supone sentir con fuerza mientras se experimenta una sensación que lleva a un pequeño paroxismo.
Jamás dejes de escribir lo que te sugiere la vida, tuya o de otros, animada o inanimada, real o ficticia.

Un inmenso abrazo, querida Alicia.
Ana Hernández Guimerá ha dicho que…
Es imposible pasar de largo ante tus poemas Alicia, muchas veces no te digo nada, pero te sigo porque te tengo entre los favoritos de los míos.
Escribes con alas y son magníficos.
Besos y cariños
Carlos Enrique Cartolano ha dicho que…
Nuestras alas mueren con cada poema. Y en el siguiente retoñan sólo hasta que alza vuelo.
Mercedes Vendramini ha dicho que…
Precioso poema Alicia! tan sincero y cierto ...

Va mi cariño!
merche marín ha dicho que…
Cuando tenía dieciocho años y multitud de poemas a los que yo sentía como birrias, en un arrebato, abrí la tapadera de la estufa de leña y deje caer todos mis versos adolescentes entre las lenguas de fuego que enseguida los hicieron desaparecer. Me he arrepentido toda la vida de aquella acción y ahora jamás tiro un poema. Lo guardo si no me gusta mucho y lo retoco, lo cambio, lo transformo...

Volar entre poemas, entre las lenguas de fuego que convirtieron en cenizas cada uno de aquellos versos jóvenes sería un sueño, cielo.
Besos.
guillermo elt ha dicho que…
Los poemas son nuestros hijos... parte o todo de nosotros.

Entiendo perfectamente lo que dices, porque al principio a mí me pasaba eso, no por vergüenza, pero sí por pudor o por timidez. Leyendo a una amiga, fuí superando barreras.

Al leerte, veo que tú las superaste hace tiempo.

Besibrazos.
Anónimo ha dicho que…
HAY UN GRAN CORAZÓN AHÍ ADENTRO!!!!
BESOS
Marisa ha dicho que…
Cuando un poema ha salido de nosotros
ya es algo cercano y aunque en el se derramen deseos imposibles no debemos de borrarlo porque ya forma parte de algo nuestro.

Un gran abrazo
Raquel María ha dicho que…
Hola Alicia!! Soy Raquel María de C del U y en algún momento nos hemos encontrado y compartido en aquel lejano pueblo del costado norte de la patria...te mando un abrazo!!
Raquel María ha dicho que…
Gran sorpresa y alegría de encontrarme con "tu país" y tan interesantes publicaciones... Felicitaciones!!!

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