La flor del ceibo
Son como labios, sedientos, que se hunden en el verde mansamente y saben que llegará el día , se marchitarán, pero en este presente, junto al viento, se saben infinitos, perfectos.
¿Por qué vivir en pequeño si podemos vivir a lo grande? La idea es crear nuestro propio camino, levantarnos cada mañana con alegría y vivir como queramos. Por eso escribo... Para dar cuenta de ello. Poesías mínimas, pero mías.