Sin merodeos

Por las calles del sosiego
se llega a destino
donde espera un albur
de vidas paralelas . . .

Y las manos cruzadas
cincelarán la aurora
de nuevos albores
y de pasos redimidos.

Una voz, un silencio
y la dulce armonía
del cosmos susurrando
mandatos inviolables.

Comentarios

Armida Leticia ha dicho que…
Un placer leerte, como siempre. Saludos desde México.
Zoe ha dicho que…
y la dulce armonía
del cosmos susurrando
mandatos inviolables.

Fuertes mandatos, ilustrados divinivamente en palabras.

Saludos desde la Clínica.
Cecy ha dicho que…
me ha gustado!!
Anónimo ha dicho que…
Llegué aquí de casualidad. Tu "pais" parece componerse de palabras bonitas. Adios y mucha suerte.

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