Ritual de otoño

Hay tanto de vos en este otoño que casi no escribo, no es necesario.
El viento me regala caricias de azucenas en esta tarde de mayo.
La pálida luz de aquella nube refleja el rubor primero.
El silencio de esta plaza sin niños, me trae tu voz llenando mis vacíos y tus manos jugando con mi sombra.
El ocre inunda las piedras, el parque, los pájaros, la risa y mi espera. Es mi color preferido, en él hay algo de final preanunciando bienvenidas.
Es otoño, cae la nostalgia con la misma cadencia de aquellas hojas que mi vecina se obstina en barrer. ¿No sabe que la nostalgia amontonada se convierte en melancolía sin tiempos? Por eso no me gusta juntar las hojas, mi vereda es la única de la cuadra en la que el sol jamás duerme.
Crujiente y dorado permanece mi mar ocre, esperando a que lo camine cual Moisés-mujer, imperturbable a los chismes de las mujeres del barrio.
No me detengo a explicarles que lo mío no es abandono, lo mío es disfrute. Es un instante perfecto, irrepetible y anhelado. Un segundo que lo destino a nosotros dos.
Es una forma de traerte a mí con este ritual de otoño.

Comentarios

Cecy ha dicho que…
Alicia, que lindo por un momento me hicistes viajar a mi infancia, cuando vivia en Rosario, recuerdo como si fuera hoy que en la puerta de casa vivian dos arboles muy altos, y en otoño cuando sus hojas empezaban a caer, parecia una alfombra que me encantaba jugar.

Gracias por hacerme viajar con este bello escrito.

Besitos
Anónimo ha dicho que…
Es un ritual de otoño compartido amiga mía.
A mí también me pone contenta desparramar hojas como vos, no sabía que era para desamontonar melancolía, ahora lo haré con más frecuencia.
Es impresionante lo que dejas en este post.
Siempre te agradeceré por él.
Leti.
Anónimo ha dicho que…
Esa comparación con Moisés femenino simplemente es SOBERBIO, Mar Rojo, Mar Ocre, lo cruzas.
Abridora de mares me tienes atrapado.
Seba
ha dicho que…
Que recuerdos... que hermosura...
que distinta que sos...
Tu vereda es la única en la que siempre hay sol...porque el sol está en vos...
Te quiero
Rox
Armida Leticia ha dicho que…
Nosotros en el Norte estamos en primavera, cuando ustedes viven el otoño con eso colores tan maravillosos.

Saludos desde México.
Anónimo ha dicho que…
Alicia:
Como dijo "enredada" el sol está en vos...
Compartimos sensaciones y admiración por estos colores y me encanta pisar un colchon de hojas...
Juan Rizzo ha dicho que…
Andamos otoñales, nomás...
Está bueno eso. Generosa como siempre tu actitud de no negarles el sol ni a las hojas caídas.
Un abrazo grande.
Pancho.
dispersa ha dicho que…
tu poema hermoso.

hace unos años en una entrevista a Sabato,entre mucho, mostraron su casa,su parque y si bien estaba cuidado,era mas natural,él, explicó q en otoño le gustaba q luzca con las hojas secas en el piso,y realmente la imágen era tan poderosa q adopté esa manera de dejarlas en el cesped,mi jardín no es tan grande pero cuando estoy por los lugares de baldosa barriendo tengo el cuidado de las hojas colocarlas en el pasto,no son muchas porq el viento las amontona cerca de las plantas.

Me extendí porq tus palabras me llevaron a él,y también algo mio,desde mañana te encontraré en los colores de la naturaleza de mi jardín y llegaran tus palabras,pero antes te abrazo fuerte.
Chúcaro ha dicho que…
Ops... que lindos poemas.... blog agregado!!!
Blas de Lezo ha dicho que…
Pero este otoño no se hace así sin su primavera que aquí te aguarda.
Este otoño es lluvia de hojas, recogidas por Eolo y espacidas como alfombra.
Este otoño desea que las pises, levemente, sin casi moverlas de su lecho oculto.
Este otoño mira mi primavera deseando toparse con ella cuando los grandes, Verano e Invierno, pugnen por su reino.
Este otoño es esta primavera, como este mar ocre es ese mar azul, gris y blanco de espuma que a todos nos une.
Un beso desde esta primavera

Josu
Carlos ha dicho que…
El otoño es más que propicio para hacer rituales, porque llevamos la nostalgia a flor de piel.

Gracias por pasar por casa.

Un beso.

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