Detrás de aquella ventana
Llegan imágenes extrañas,
de noches oscuras,
te perderás lo soñado,
De pronto cayó la foto,
el alma quedó congelado,
ando con paso muy lento,
siento que me están llamando,
tengo los huesos golpeados,
hasta la llevo colgando,
me atemoriza la ventana,
tal vez me he despertado...
que creí haber visto una dama,
detrás de aquella ventana,
podré no saber su nombre,
cómo vestía, dónde ella estaba,
pero te aseguro hermano,
que aún llevo conmigo su mirada.
Se me está terminando el día
sé que no tengo mañana,
voy camino a mi tumba,
de noches oscuras,
ventanas empañadas,
las cortinas velan las miradas,
de distancias desperdigadas,
trato de recordar el sueño,
se me cruzan las alambradas,
por algo lo habré olvidado,
en los ojos hay lagañas,
decían las viejas comadres,
cuando restregas tus ojos,
apenas despunta el alba,te perderás lo soñado,
tu día será de hilachas...
el alma quedó congelado,
algo le habían quitado,
en aquel lejano agotado,
hoy la fatiga me gana,
ya ni recuerdo lo respirado,ando con paso muy lento,
siento que me están llamando,
tengo los huesos golpeados,
el corazón destrozado,
la daga que me han clavado,hasta la llevo colgando,
me atemoriza la ventana,
tal vez me he despertado...
No sé por qué regresa el momento,
el lugar, la circunstancia,
creí haber visto una dama,
detrás de esa ventana,
dicen que estoy confundido,
que allí ya nadie habita,
debe ser un recuerdo,
de esos que regurgitan,
regresan de vez en cuando,
a traer tiempos idos,
lo que ha quedado atrás,
no se recupera con hilos...
Y así seguí mi camino,
paralelo a las alambradas,
ya no sé si estoy despierto,
tampoco si digo patrañas,
pero te aseguro hermano,que creí haber visto una dama,
detrás de aquella ventana,
podré no saber su nombre,
cómo vestía, dónde ella estaba,
pero te aseguro hermano,
que aún llevo conmigo su mirada.
Se me está terminando el día
sé que no tengo mañana,
voy camino a mi tumba,
Detrás de una de las ventanas de mi casa de la niñez Gracias Víctor, hoy siete de septiembre, hermoso regalo de cumpleaños me das. |
estoy regalando recuerdos,
hacéme el favor hermano,
no puedo dejarte el sueño,
dejame dormir sin tiempo,
ya no quiero andar respirando,
prefiero saltar la tranquera,
y quedarme con su mirada,
le contaré a mi diosito,
que cuando su ángel me llamaba,
yo creí haber visto una dama,
detrás de aquella ventana...
Víctor Cerasale
Comentarios
Esas cosas que tiene el destino, de encontrarnos con seres maravillosos, casi sin darnos cuenta y aprender que su amistad es lo mejor que esta vida nos brinda. En este caso voy a nombrar a dos: Luis Madrigal, quien ocasionó que esta fotografía mía salga a la luz y Víctor Cerasale quien escribió esta bella poesía motivado por la misma.
La leí una vez, otra vez y decidí que le haga compañía también mi blog. Infinitamente agradecida hoy la comparto con ustedes.
Feliz fin de semana.
Alicia
Un saludo Alicia
Un fuerte abrazo
Un abrazo desde el sur
El poema es hermoso, con su toque de misterio, su rima avasalladora y el puntito especial de haber sido tú la inspiradora.
En cuanto a la foto, me alegro que el amigo Luis Madrigal te diera tan buen consejo, porque estás bellísima.
Un beso.
asi como una máquina del tiempo
lindo poema
un abrazo
Oscar