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Tu voz y mis hortensias
Hace falta que lluevas en palabras para que vuelva a crecer el encuentro. Que tu voz sea generosa tierra, y que albergue mis silencios viejos. Hace tiempo que los doblo prolijos, hace tiempo que laten a mi abrigo. Por costumbre ya ni los despierto. Quizás tu voz llegue hasta el jardín perdido donde se esconden los "te quiero" nuevos, Así, será pradera lo que hoy es desierto. Y entre los helechos secos de la ausencia...
Libro abierto
No me cuentes de tu vida Dime si eres feliz Si tus viejos odios ya son cenizas. Si tus confusiones no te han perdido en un mar distinto al que habías previsto No me mientas, mírame a los ojos. Ningún secreto tuyo puede sorprenderme Sé que esperas a la muerte (todos la esperamos) Sé que estás harto del vacío (yo también lo estoy) Se que estás harto de renuncias (son las mismas que las mías) Pero yo no ando por la vida contando como muero a cada rato No huyo de mí misma para parecer otra. No oculto nada y a nada le temo, ni siquiera a la nada. Puedes saber de mí, todo. Soy un libro abierto Me siento en paz, ojalá puedas sentir lo mismo.

Comentarios
Un abrazo Alicia.
Pero todo pasa.
Un abrazo.
si nos recuerdan con amor, el pulso será completo
si nos recuerdan con desprecio, el pulso será pequeño
si no nos recuerdan, es el abismo total
un abrazo y feliz feliz semana
de los alumnos alguno quedará.
Un abrazo fuerte amiga, desde mi Librillo.
Quizás soy yo la que más recuerda, la emoción al contarles esos cuentos, ellos al traerlos al presente avivan aquella emoción.
Un abrazo a todos, mil gracias por dejar una huella indispensable en mi país.
Ciertamente, nunca debemos esperar que quienes se llaman racionales pero no viven, nos recuerden. Lo harán todos los seres vivos y, de entre ellos, aquellos que su razón se formó al abrigo de una lumbre, en invierno, cuando le contaban historias que forjaron su personalidad.
Un fuerte abrazo, querida Alicia.
Un cordial saludo.