Ausencia
Como un condenado a muerte,
va trazando una raya en la pared de su celda
para contar los días que le quedan,
así voy sumando los siglos de tu ausencia.
Cuando no me quede más lugar para ella
rayaré sobre lo rayado, quizás así,
logre tacharla, borrarla... ¿negarla?
Lo que sea, pero ya no quiero
esta ausencia, es lo mismo que la nada.
Comentarios
Un abrazo, Alicia.
Un abrazo.