Entre el dormir de todos, despierto.
Ando por el costado izquierdo del insomnio. Miro a los otros que duermen, siempre. Un tiempo distinto me espera, subo a su barca y navego las horas, entre cantos de gallos que se inquietan y arenas movedizas que irrumpen. Voy viajando, creciendo en la noche. Silba la incertidumbre sobre mi piel pero nada impide mi paso. Maduran en segundos los duraznos y se iluminan las flores en mis manos. Por cielo, un libro, algo se lee, pero no tiene que ver conmigo. Luego, las palabras se convierten en palomas y ellas sí, dibujan un nombre conocido. El día lo muerde con lujuria. Compruebo que todo fue un sueño, tiemblo al intentar recordar ese nombre, no lo logro, se duerme entre el dormir de todos… “El sueño” Henri Rousseau