Miro a mi madre y me veo
No pierdo el tiempo en pensar cómo seré en la ancianidad.
Miro a mi madre y me veo. O deseo verme. Ansío de ella la lucidez, la risa que hace reír a todos, nadie dice de ella que es una vieja senil, como si fuese poco lo de vieja...
Creo que lo que seremos cuando ancianos ya lo vamos gestando desde niños.
O como dicen por ahí, al pasar de los años, nos vamos pareciendo más a nosotros mismos, sólo que no nos damos cuenta de ello.
Por eso, agradezco el haber aprendido a ser paciente, sin ser conformista, ver lo bueno en el otro por más que todos digan lo contrario y compartir la belleza de lo simple.
Cosas que a la larga, ayudarán. Lo sé.
Miro a mi madre y me veo. O deseo verme. Ansío de ella la lucidez, la risa que hace reír a todos, nadie dice de ella que es una vieja senil, como si fuese poco lo de vieja...
Creo que lo que seremos cuando ancianos ya lo vamos gestando desde niños.
O como dicen por ahí, al pasar de los años, nos vamos pareciendo más a nosotros mismos, sólo que no nos damos cuenta de ello.
Por eso, agradezco el haber aprendido a ser paciente, sin ser conformista, ver lo bueno en el otro por más que todos digan lo contrario y compartir la belleza de lo simple.
Cosas que a la larga, ayudarán. Lo sé.
Comentarios
Un abrazo.
Besos, mi buena veci.
Un abrazo.
Un abrazo
Fina
Un abrazo