En el país de Alicia Abatilli

¿Y qué? Si soy informal, imperfecta,  hasta indolente. ¿Y qué? Si aún mi búsqueda no tiene respuesta. ¿Y qué? Si me afianzo en mis cuarenta y me descubro tan incierta. ¿Y qué? Si te enrostro un adiós, Acelerando mis “te amo”. ¿Y qué? ¿Y qué? Si estoy convencida que nos necesitamos tanto para vivir como para morir...

Amar Es ver el mundo En tu mirada. Amar Es liberarnos Del tiempo. Amar Es designio Y es nuestro privilegio. Amar Es cercar la tristeza Alejando la muerte. Es trocar accidentes Por sustancias. Es convertir teoría En praxis. Es hacer de una bienvenida Un encuentro eterno. Es dibujarte con la memoria Sin esfuerzo. Es resurgir de la agonía Por tus caricias. Es prolongar los días Sin las horas. Es tener tu suspiro En mi aliento. Es saberse inmortal En tu presencia. Amar No es unívoco Se predica de mil formas. Su existencia es todo Su inexistencia es la nada…

Necesito: Que mi angustia se torne en delicado remolino, para que se lleve tantas despedidas Que a mis mañanas las pintes de arco iris, reviviendo los desteñidos colores de la esperanza Que tu voz se enganche cual sortija en el dulce repicar de la alegría. Que no expliques lo que no tiene sentido, para que no me artes con tiempos idos. Que enciendas poco a poco mi deseo sin precipitarte a lo desconocido. Que no cuestiones mis idas y venidas, tan solo respeta mis búsquedas imprevistas Que fractures las alas del olvido, para que retorne al fin la esperanza en el destino. Que me dejes sola con mis silencios para atraparme luego en tus ensueños. Que hagas de mi nostalgia una tumba festiva, Convirtiendo mi eterno dolor en un himno a la vida.

I Desterrada la voz que se propaga Desde lo no dicho Enuncio la palabra que se entusiasma Con eufemismos. II Si tu mano está en la mía Me corroboras que hoy Nos espera un gran día. III En el país de las maravillas Encontré, recostado en el espejo Tu recuerdo sin reflejo. IV Mi procesión de sombras Escudriña recuerdos Que otrora fueran retoños De luces fecundadas por el tiempo. Hoy son valles de ausencia Poblados de fatuas promesas. V El día derrama su verdad Que la noche ocultó por piedad. VI. La lágrima recorre la huella Por la que alguna vez se despeñó la risa. VII De ocres se viste el otoño Como de grises mi alegría, De verdes-ilusión mi espera Y de negro mi presentimiento. VIII Los pájaros de tus besos alucinan A mi piel que se hipnotiza, Desconociendo mi propio ser Bautizado en tu ser. IX Tiritan las rosas de tus dedos Entumeciendo mi partida. X Explota mi ser _ mujer En diamantes de sol. Él me regala un universo En cada beso. XI En mi atrapa-sueños Encontré, tu pasión encaramada

I- Liberación: En una de las paredes del sótano en que estaban encerrados hacía mas de un año, la madre, pintó un globo aerostático, subió a sus cinco hijos a él, y los liberó de la persecución nazi. II El relincho: Prepara el jinete la montura, escucha relinchar a su corcel, impaciente. Busca un bocado tierno para agasajarlo esa mañana. Camino a las caballerizas, canta la misma canción de siempre, la que cantaba aquella noche cuando encontró a su caballo muerto, al pie de un barranco… III Modernismo: El Diablo dejó de tener frío. Descubrió las maravillas del gas natural… IV Suspicacia: El día designado para el Apocalipsis cayó justo un primero de mayo, por temor a las consecuencias gremiales se lo postergó para mas adelante… V Resurrección: La llevaba tan adentro que nadie le creía cuando decía que él no era uno sino dos. Al morir se comprobó su verdad tanto tiempo desmentida por los demás: Resucitó por amor.

Tu presencia Replegará deserciones infundadas, Donará libertades desaprendidas. Suplirá impiedad por indulgencias, Resentimiento por complacencias. Tu presencia Cubrirá mis baldíos de rosas encendidas. Desatará palabras, hartas de ser mendigas Reverdecerá la esperanza de mis mañanas.